A esta receta la he llamado tortitas saladas rellenas a falta de un nombre mejor. Básicamente es la misma masa que se utilizo para hacer las tortitas pero con un relleno más acorde a un plato principal.
Ingredientes:
Si vemos que la primera tanda la masa no crece lo suficiente, podemos añadirle un poco más de levadura o echar más masa a la sartén. Lo de echarle más masa no es muy recomendable, ya que como más masa se eche, más difícil será luego darle la vuelta debido a que la parte de arriba aún estará muy líquida.
Ingredientes:
- 2 vasos de harina
- 1 vaso y 1/4 de agua
- 1 huevo
- 1/2 sobre de levadura
- Sal (al gusto)
- Pechuga de pollo
- Lechuga
- Melocotón en almíbar
- 1 cucharada de mayonesa
- 1 cucharada de ketchup
En un bol o vaso alto mezclamos la harina, el agua, el huevo, la levadura y la sal hasta que nos quede una masa sin grumos.
Ponemos a calentar una sartén o cazo, más bien pequeño, ya que dependiendo de su tamaño obtendremos un pan más o menos grande.
Cuando la sartén esté bien caliente, echamos 1 dedo de masa y la tapamos.
Lo de taparla es importante ya que así la parte de arriba también se va haciendo y a la hora de darle la vuelta no estará tan líquida, con lo cual será más fácil.
Pasados 3 o 4 minutos, le damos la vuelta con cuidado y lo hacemos por el otro lado. Cuando esté hecha por los 2 lados la sacamos de la sartén.
Repetimos este procedimiento con toda la masa que tengamos.
Mientras se va haciendo la masa, cortamos la lechuga y el melocotón en trozos muy finos (en juliana) y la pechuga de pollo en tiras.
Cuando el pan esté hecho, lo sacamos de la sartén.
Aprovechando que la sartén está caliente para hacer la pechuga de pollo a la plancha.
Aprovechando que la sartén está caliente para hacer la pechuga de pollo a la plancha.
Cuando la pechuga esté hecha, mezclamos en un bol la pechuga, la lechuga, el melocotón, la mayonesa y el ketchup.
Con cuidado abrimos la masa con un cuchillo. No tenemos que abrirlo del todo, solo hacer una ranura en un lateral y poco a poco ir cortándolo por dentro sin llegar a los laterales.
Si vemos que la primera tanda la masa no crece lo suficiente, podemos añadirle un poco más de levadura o echar más masa a la sartén. Lo de echarle más masa no es muy recomendable, ya que como más masa se eche, más difícil será luego darle la vuelta debido a que la parte de arriba aún estará muy líquida.
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